Hola, ¿qué hay?

Poco a poco iré colgando algunos de mis artículos que me mandan escribir en clase, pero me gustaría poder escribir más a menudo, por lo menos alguno a diario, pero la falta de tiempo me lo impide.

Hoy he estado en una universidad, de "prácticas" donde nos han dado una charla acerca de una orientación a nivel educativo sobre la vida universitaria, ya que a veces un adolescente cuando alcanza cierta edad, se ve en la obligación de tener responsabilidades y, además, tendrá que elegir cual va a ser su vocación.
Pero a veces, cuando se está indeciso llega a plantearse ciertas preguntas, en las cuales, tendrá que ir buscando él/ella mism@ su respuesta, por tanto elegir nos compromete.
¿Quién soy yo? ¿Qué nos gusta? ¿Qué se nos da bien? ¿Qué queremos hacer?
Estas son algunas de las preguntas que uno en algún momento de su vida se plantea, y las mejores respuestas están en uno mismo, es decir, mediante tus valores, gustos, habilidades y hasta cabalmente mediante tus defectos llegas a conocerte realmente como eres y qué deberías hacer o en qué podrías destacar. San Agustín durante su obra afirmó una frase que considero que tiene mérito, dice así: "Conócete, acéptate y supérate".
En definitiva, si no lo haces tú mismo, ¿quién lo iba a hacer?