jueves, 29 de noviembre de 2012

Disertación Santo Tomás de Aquino.

Santo Tomás afirma que Dios es necesario y que él mismo ha creado el mundo, y conoce el mundo al pensarse a sí mismo, además de cuidar sus criaturas procura mediante la razón darle credibilidad a la fe divina. Si consique que la contemplación o conocimiento del ser supremo, Dios, se lleve a cabo conseguirá una mayor felicidad, mediante la ley natural que está estipulada por Dios, para regir el comportamiento del hombre.
A su vez la ley natural tiene varios preceptos que se complementan en uno principal, el cual debe desarrollar la propia esencia realizando el bien y evitando el mal.
Asimismo derivan tres preceptos o principios generales, que para cumplir la esencia tienen que desarrollarse. En primer lugar el que cumple la facultad vegetativa es el que deber conservar la vida, hoy en día acciones o hechos que corrompan esta facultad serían: un asesinato, la esclavitud extrema que consiga alcanzar la muerte, niños con armas ganándose la vida en juegos donde la política pone normas. En segundo lugar, el deber de procrear y educar a los hijos que desarrolla la facultad sensitiva, en este principio, el ser supremo no permitiría que existan niños sin oportunidad de tener una educación, unos estudios, otra de las leyes o actitudes que para Dios, hoy en día, sería pecado es el derecho a la homosexualidad, ya que impide el acto de procrear y el derecho de un niño a la vida, otro ejemplo de pecado para Dios que influye en la facultad vegetativa sería el aborto, e incluso la imposibilidad de acceder al uso de medicamentos para poder conservar la vida. Por último, el deber de respetar la justicia social y de buscar la verdad (conocimiento divino), desarrollando la facultad racional. A día de hoy hay multitud de injusticias para el ser humano que serían pecado, por ejemplo el uso de un arma para matar a alguien inocente y que posteriormente no se tomen medidas justas.
En el ámbito social hay desigualdades ya que unos son ricos, en cambio, otros son pobres, por tanto no hay un bien común. Todos deberíamos tener los mismos derechos, según la teoría ésto es correcto, pero no está llevado a la práctica.
Debido a intereses políticos y económicos no existe una justicia social, el egoísmo sería otro pecado, porque sólo una minoría tiene la elección de elegir, en cambio existe la pobreza y las indiferencias sociales que están sometidas a una injusticia social.


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